lunes, 10 de julio de 2017

DE PROFESIÓN SEÑO

Esta semana he recibido la comunicación del colegio de mi hija mayor con las recomendaciones de "la seño" para este verano.
Sinceramente, hacia tiempo que no leía algo tan motivador como esto. Un resumen y una lección de vida tan sencilla como apasionante.
Creo que esta carta habría que leerla todos los días de nuestra vida al comenzar el día y al llegar la noche tendríamos que apuntar qué hemos conseguido hacer.
Leerla me ha hecho recordar, no sólo mi niñez, sino también la belleza del trabajo que conlleva ser profes@r, seño, maestr@.... Todos en algún momento de nuestra vida hemos tenido una figura de referencia, y estoy casi convencido que un "enseñad@r" ha marcado parte de nuestra actual personalidad.
Por eso pienso que esta profesión lleva una gran carga de magia, de ilusión, de motivación por ofrecer las herramientas para descubrir. En definitiva, ilusión para vivir.

Esta carta es toda una lección de vida. Después de leerla, decidme cuántas cosas hacéis diariamente.

"Queridas Familias:

Deseamos que durante este verano disfrutéis y hagáis de cada día, un día especial. El tiempo pasa muy rápido y cada segundo es irrepetible.

Nuestra recomendación para lograrlo es que no dejéis de amar, besar, saltar, nadar, cantar, bailar, descansar, abrazar, ensuciarse, decir cosas bonitas, perdonar, viajar, dejar volar la imaginación, explorar, escuchar música, plantar un árbol, divertirse, ayudar, pasear, aburrirse, inventar, mirar estrellas... y realizar todo aquello que habéis querido hacer durante todo el curso pero no habéis podido.
Al mismo tiempo que todo lo anterior es importantísimo que os divirtáis leyendo a diario. Elegid historias que os gusten y vivid un verano de cuentos.

Un abrazo muy fuerte de la seño"

Feliz Verano, Feliz Vida.

domingo, 2 de julio de 2017

LAS VUELTAS QUE DA LA VIDA O LAS VUELTAS DAN MUCHA VIDA.



Hace unas semanas observé en una agencia de viajes una cartel promocional que me llamó la atención. Me gusto la original frase de su texto, así como la iconografía puesta hacia abajo. "Las vueltas dan mucha vida".



 Una idea genial y un resumen de la genialidad de la vida. Es cierto que cuantas más vueltas, mucha más experiencias, más conocimiento y sobre todo más amplitud de miras. La visión de nuestro entorno se va encerrando conforme vamos cumpliendo más años y nos aposentamos en nuestra razón, otorgando a ésta la virtud de la más alta exigencia de verdad y de egoísmo.

Viajamos durante el tiempo de la vida con la certeza extrema de que tenemos gran parte de razón. Un estado de egocentrismo asumido por nuestras propias experiencias que van conformando nuestra propia realidad. Incluso llegamos a defenestrar otras ideas, otras formas de pensar y otras posibles alternativas. Nos vamos encerrando en un trozo de papel cuadriculado sin querer entender que puede existir una maravillosa pared blanca donde podemos volver a reescribir nuestras creencias, cuando y cómo queramos. 

Siguiendo con las agencias de viaje, llegó a mi teléfono un video de otra compañía relacionada con los negocios de viajes. Un espléndido video que muestra la capacidad del ser humano de clavarse fijo, tal clavo en la madera, en nuestras propias creencias. Sin embargo, la maravilla del ser humano es su capacidad de sentir y es entonces cuándo uno descubre esa brizna de emoción que a todos nos envuelve y justo ahí aparece la posibilidad de seguir creciendo, seguir aprendiendo y seguir aceptando que nosotros no somos más que una suma de los otros.






Como dice Gueshe Kelsang Gyatso en su libro "Transforma tu Vida": "Por lo general, cuando tenemos problemas, culpamos a los demás, pero el verdadero culpable es nuestro egoísmo. Cuando lo hayamos identificado correctamente, debemos considerar que es nuestro peor enemigo y acusarlo de nuestras desgracias. Aunque es beneficioso tener paciencia con los demás y perdonarles sus defectos, no debemos ser tolerantes con nuestras actitudes egoístas, porque cuanto más lo seamos, más no perjudicarán. Si queremos enfadarnos con algo, debemos hacerlo con el demonio del egoísmo".