Vuelvo a escribir, retomo el aliento de las palabras que devuelven la riqueza al pensamiento. Gracias por estar ahí a todos los que sabéis leer y a todos los que sabéis leer entre líneas. En fin, hace unos pocos días un amigo me dijo que persistía en el desaliento, que incluso el nombre del blog destilaba flecos de nostalgia y antiguedad.
Sinceramente me sentó como una patada en el estomago. Claro está que a nadie le gusta que le digan la cruda realidad. Así que llevo tiempo pensando en todo esto y he decidido volver a escribir, que ya había dejado desangelado este hueco de vomito espiritual. Así que ahí vamos:
Pues fijate tú, que esto del cambio todavía no sé cómo se come, y eso que ya soy un tío hecho y derecho (más bien izquierdo) que diría mi abuelo.
Ahora hay que estar preparado para el cambio, para conseguir encontrar el modo de encontrarse a uno mismo (yo lo hago todo los días cuando voy a hacer pipi, me encuentro a mi mismo, allí mismo, tocandome eso mismo.....me digo ¡coño que estoy!).
El único inconveniente que veo es que paso más tiempo trabajando que disfrutando de lo que quiero, mi hija y tiempo para leer, escribir, nadar, pasear, tomar cañas, o ver la telenovela que echan por la tarde...Pero de momento, no me ha tocado la primitiva,,, que como siempre no toca a nadie que conoces. A veces pienso que no toca nunca y que es todo un bulo, como el hombre del saco (o este si que existía,,,,ya no sé nada).
Nada, nada, que era broma...que estoy preparado para el cambio. Voy a cambiar y a partir de hoy mismo me voy a dedicar a encontrarme y hacer lo que quiero hacer. Es decir, me levanto a hacer pipi y me toco los huevos para reforzar mi yo, esto para encontrarme. Para hacer lo que quiero hacer, voy a dedicarme a echar la puta primitiva más a menudo.
Ahora sí que estoy preparado para el cambio.
PD: Me encanta el cambio, porque nunca sabes por donde viene. Gracias, vale adiós (que diria mi hija). jjajajaajajajajajaj
